ADORANDO AL SEÑOR EN LA ADVERSIDAD

Valle de Beracá
2 Crónicas 20.1-29

Cuando determinamos arreglar nuestra vida y comenzamos a prepararnos para desarrollar buenos hábitos se presentaran a nuestras vidas situaciones difíciles que querrán apagarnos el ánimo. En nuestra experiencia hemos visto que cada vez que alguien quiere esforzarse por cambiar el enemigo siempre tratará de derribarlo, a través de situaciones adversas, tratando de apagar sus deseos de cambio. Muchos se desaniman, renuncian otros se aferran y lucha para lograr lo que desean. ¿Cómo podemos responder  a un tiempo de adversidad?


En 2 Crónicas 20 encontramos una historia extraordinaria sobre el rey Josafat, donde aprendemos lecciones importantes  acerca de cómo responder en el tiempo de adversidad.

Después de esto, los moabitas, los amonitas y algunos de los meunitas le declararon la guerra a Josafat, 2 Crónicas 20.2 NVI

La historia comienza con un “después de esto” en el capítulo anterior Josafat está tratando de llevar al pueblo a Dios, podemos ver el noble corazón del rey aunque él vivía en Jerusalén visitaba sus ciudades para guiar al pueblo a la búsqueda de Dios, pues se preocupaba por la salud espiritual del pueblo.

Josafat se estableció en Jerusalén, pero volvió a visitar al pueblo, desde Berseba hasta los montes de Efraín, para hacerlo volver al Señor, Dios de sus antepasados. 2 Crónicas 19.4

Pues bien “después de esto” vinieron algunas naciones a pelear contra él, la biblia lo describe como una “gran multitud”…

Y alguien fue a informarle: «Del otro lado del Mar Muerto y de Edom viene contra ti una gran multitud. Ahora están en Jazezón Tamar, es decir, en Engadi.»

Esto llenó de temor el corazón del rey, en otras versiones dicen que el rey se aterrorizó, y ¿Cómo no sentirse así después de saber que por todos lados vienen contra él? El problema no es pelear, el problema es que son muchos. ¿Alguna vez se ha sentido así? Con demasiados problemas sobre su vida, uno tras otro, ya no siente lo duro sino lo tupido, cuando se juntan los recibos, o los gastos de ingreso a las escuelas, o los problemas familiares, hay momentos en los que no se puede concentrar en un problema porque son varios, en lo que piensa en uno le vienen al recuerdo otros, o tal vez puede resolver alguno pero ¿Qué hay de los demás? Josafat posiblemente podría pelear contra un reino pero no tendría suficientes fuerzas para enfrentar a otro. Así que los cálculos de Josafat, no servirían en este momento, a veces cuando los problemas se acumulan ya desde antes sabes que no podrás con ellos, y eso causa temor en el corazón. Pero en medio de su temor Josafat nos enseña lo que debemos hacer para enfrentar la adversidad

FRENTE A UN GRAN PROBLEMA DEBES RECORDAR QUE TIENES UN GRAN DIOS

Entonces él tuvo temor; y Josafat humilló su rostro para consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá. 2 Crónicas 20.3

“Nunca dejes que un problema te intimide, deja que te motive a orar más” Rick Warren

Antes de querer resolver el problema por sí mismo Josafat buscó la dirección de Dios, por lo regular para muchos personas buscar a Dios es la última opción y no la primera.

El mes pasado hablamos sobre las cosas que las personas ven, a veces le ponemos más atención al fuerte viento que a Jesús que está frente a nosotros. Cuando recordamos que tenemos un gran Dios dejamos de enfocarnos en los problemas. Por eso David decía: “engrandeced al Señor conmigo” (salmo 34.3) porque cuando más lo engrandeces más pequeños se vuelven tus problemas. Al engrandecer a Dios agrandamos nuestra fe en Él.

Debes recordar al Dios grande que tienes y las cosas grandes que ha hecho.

Y dijo: « Señor, Dios de nuestros antepasados, ¿no eres tú el Dios del cielo, y el que gobierna a todas las naciones? ¡Es tal tu fuerza y tú poder que no hay quien pueda resistirte! ¿No fuiste tú, Dios nuestro, quien a los ojos de tu pueblo Israel expulsó a los habitantes de esta tierra? ¿Y no fuiste tú quien les dio para siempre esta tierra a los descendientes de tu amigo Abraham? (V. 6-7)
Josafat en su oración recuerda que nadie ha podido hacerle frente a Dios, además recuerda como Dios los ha ayudado en el pasado, dice que Dios expulso a los habitantes de aquella tierra, declarando que no fueron ellos quienes conquistaron la tierra, sino Dios.
¿De cuantos problemas has salido en el pasado? En todas esas ocasiones Dios ha tenido misericordia de nosotros y nos ha ayudado, si Él lo hizo en el pasado lo volverá a hacer otra vez.

Dios quiere que recuerdes quien es Él, que cosas ha hecho y que cosas ha dicho.
Debes reconocer que tú eres pequeño pero Dios es grande

¡Oh Dios nuestro! ¿No los juzgarás tú? Porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos. V.12

Es difícil creer en Dios cuando no reconocemos nuestra incapacidad o impotencia en algunas situaciones, mientras tengamos oportunidades, “amigos”, opciones en las cuales tengamos descanso, no podremos ver lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas.

El primer paso siempre es aceptar nuestra incapacidad, Josafat dijo “en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud”  cuando aceptas que eres impotente frente a los problemas le das la oportunidad a Dios para que Él obre en tu vida. Algunas personas deben aceptar que hay situaciones en sus vidas que se han salido de control; Deben aceptar que no pueden hacerle frente a los problemas financieros o familiares que están viviendo; deben aceptar que necesitan a Dios en sus vidas para que los ayude.

El rey también dijo “no sabemos que hacer” a veces no solamente no tenemos el poder para enfrentar una situación sino que además no tenemos ni idea de cómo enfrentarla, muchas veces la preocupación nos absorbe porque tratamos de encontrar una solución a algo prácticamente imposible, lo único que lograremos es invertir mucho tiempo en nada, lo que lograremos es desatender situaciones que nos requieren en ese momento. Debemos aprender a decir como Josafat: “no sabemos que hacer” “a ti volvemos nuestros ojos” es hora de dejar de ver los fuertes vientos, y comenzar a ver al Señor; es hora de dejar de ver lo grande que es el problema y ver lo más grande que es Dios; es hora de ver a Dios en medio de nuestra adversidad.

FRENTE A UN GRAN PROBLEMA DEBES TENER UNA GRAN ACTITUD

No debes temer.
 Y dijo Jahaziel: «Escuchen, habitantes de Judá y de Jerusalén, y escuche también Su Majestad. Así dice el Señor: “No tengan miedo ni se acobarden cuando vean ese gran ejército, porque la batalla no es de ustedes sino mía.  (v.15)

Dios quiere que no tengas miedo y te da una gran razón, “la batalla no es de ustedes sino mía”, no trates de pelear batallas de Dios cuando eres solamente un hombre, debes aprender a descansar en Dios. Cada vez que hay problemas las personas quieren arreglarlos, y muchas veces no lo están arreglando sino al contrario lo están empeorando, porque están luchando con lo imposible, deben aprender a poner las cosas imposibles en manos del Dios que todo lo puede.

No debes intervenir.
Pero ustedes no tendrán que intervenir en esta batalla. V.17

Estamos acostumbrados a como se dice meter nuestra cuchara en todo, pero la realidad es que debemos a prender que no tenemos el control de todo, no podemos resolverlo todo, Dios nos ha dado la capacidad de resolver situaciones pero algunas están completamente fuera de nuestro alcance. A veces con nuestros hijos queremos resolver sus problemas pero no siempre estaremos allí para hacerlo, no tenemos el control de todo, no controlamos el día que nacimos, no controlamos en donde nacimos, ni quienes serían nuestros padres, muchas cosas están fuera de nuestro control. Dios quiere simplemente que estemos quietos, que no nos metamos en el proceso, que no intervengamos, Dios simplemente quiere que veamos como Él lo hará.

Debes Quedarte quieto.
…Simplemente, quédense quietos en sus puestos, para que vean la salvación que el Señor les dará. ¡Habitantes de Judá y de Jerusalén, no tengan miedo ni se acobarden! Salgan mañana contra ellos, porque yo, el Señor, estaré con ustedes.” » v.17

Esto se oye muy fácil pero es muy difícil de hacer, porque a muchos no les gusta estar quietos, hay muchas personas que viven una vida agitada, y cuando llega un tiempo de adversidad para ellos en sus mentes no existe la opción de estar quietos. Quedarse quieto requiere de mucha voluntad y confianza en Dios. Dios no quiere que retrocedas ni que avances, solamente quiere que te quedes en tu lugar, frente a una adversidad algunas personas tomaran una de esas dos decisiones retrocederán ante sus problemas matrimoniales o lucharan, pero a veces es necesario quedarse quieto y esperar en Dios.

¿Cómo se puede lograr esto? No tener miedo, no intervenir, quedarse quieto.
 Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados. 2 Crónicas 20.20 RVR60

Las personas desean dos cosas en este mundo, estabilidad y éxito. Y este versículo nos da la clave para tenerlas, la estabilidad viene de creer en Dios y el éxito de creer en su Palabra.

FRENTE A UN GRAN PROBLEMA DEBES AGRADECER AL SEÑOR POR SU RESPUESTA

Después de consultar con el pueblo, Josafat designó a los que irían al frente del ejército para cantar al Señor y alabar el esplendor de su santidad con el cántico: «Den gracias al Señor;     su gran amor perdura para siempre.» v.21

Estamos acostumbrados a dar gracias por las cosas que se hacen por nosotros, estamos acostumbrados a dar gracias a Dios por las cosas que nos da, pero no acostumbramos a agradecer y adorarlo por las cosas que aún no ocurren. Queremos que ocurran primero para después darle las gracias. Muchas veces decimos: “Señor, si tú haces… entonces yo…” queremos que Dios lo haga para después responder nosotros.

Acerca de George Müller y su orfanato se dice que: Cierta vez no había nada para ofrecer a los niños al desayuno. Los niños se sentaron en torno a las mesas como de costumbre. Allí estaban los platos y los jarros, pero no había nada en ellos. Entonces Müller dijo: «Daremos gracias a Dios por lo que vamos a recibir». No bien habían terminado de orar, cuando sonó un aldabazo en la puerta. Un lechero mayorista había tenido un accidente, rompiéndose una de las ruedas de su vagón, frente a la puerta del orfanato, por lo cual había entendido que debía entregar la leche a los niños. Mientras descargaban la leche, llegaron unos carritos de la panadería más selecta de Bristol, con un mensaje que decía que toda la hornada de pan de la noche anterior, por cierto descuido, no tenía la hermosa presentación de costumbre, así que la donaban a los niños. Así fue cómo, con muy poco retraso, los niños recibieron aquel día su desayuno ¡y en abundancia!

Jesús antes de resucitar a Lázaro dijo: Entonces quitaron la piedra. Jesús, alzando la vista, dijo: —Padre, te doy gracias porque me has escuchado Ya sabía yo que siempre me escuchas, pero lo dije por la gente que está aquí presente, para que crean que tú me enviaste. 43 Dicho esto, gritó con todas sus fuerzas: — ¡Lázaro, sal fuera!  Juan 11.41-43

“Agradecer a Dios por algo que recibes se llama gratitud, pero agradecer a Dios por algo que aún no has recibido se llama fe” Rick Warren

El cantico es un arma efectiva en la batalla espiritual.

Tan pronto como empezaron a entonar este cántico de alabanza, el Señor puso emboscadas contra los amonitas, los moabitas y los del monte de Seír que habían venido contra Judá, y los derrotó.v.22

No tenemos idea del poder que tiene la alabanza a Dios, a veces pensamos que no es muy importante, que si nos la perdemos no importa porque podemos llegar al tema, pero en realidad es en la alabanza donde recibimos respuestas a muchas de nuestras necesidades, en la alabanza algunas personas encuentran sanidad para su alma, o encuentran fortaleza para alguna situación, o lo que es  mejor mientras alabamos Dios ya está obrando en nuestros problemas.

Una gran adversidad dejará una gran bendición.

Cuando los hombres de Judá llegaron a la torre del desierto para ver el gran ejército enemigo, no vieron sino los cadáveres que yacían en tierra. ¡Ninguno había escapado con vida! 25 Entonces Josafat y su gente fueron para apoderarse del botín, y entre los cadáveres encontraron muchas riquezas, vestidos y joyas preciosas. Cada uno se apoderó de todo lo que quiso, hasta más no poder. Era tanto el botín, que tardaron tres días en recogerlo.  V.24-25

Es verdad que el ejército era muy grande pero también dejo grandes bendiciones, debes aprender a encontrar la bendición en las adversidades de la vida. Los pequeños problemas te dejarán pequeñas enseñanzas, pero los grandes te pueden dar grandes lecciones.

El cuarto día se congregaron en el valle de Beracá, y alabaron al Señor; por eso llamaron a ese lugar el valle de Beracá, nombre con el que hasta hoy se le conoce. V.26

Los hijos de Israel no solamente alabaron antes de la batalla sino también después de ella. Si tenían razones para alabarlo mientras el enemigo estaba frente a ellos, ahora con mayor razón lo alaban porque Dios les ha dado la victoria.

Más tarde, todos los de Judá y Jerusalén, con Josafat a la cabeza, regresaron a Jerusalén llenos de gozo porque el Señor los había librado de sus enemigos. 28 Al llegar, entraron en el templo del Señor al son de arpas, liras y trompetas. 29 Al oír las naciones de la tierra cómo el Señor había peleado contra los enemigos de Israel, el temor de Dios se apoderó de ellas.30 Por lo tanto, el reinado de Josafat disfrutó de tranquilidad, y Dios le dio paz por todas partes. V. 27-29


Si deseamos tener paz por todas partes debemos aprender a desarrollar un corazón adorador, un corazón que confía en Dios en medio de las adversidades. No hay más grande testimonio que Las personas que te rodean se den cuenta que Dios está contigo y pelea por ti. 

Lee la primera parte de esta serie aqui

No hay comentarios:

coméntanos si te ha sido de utilidad esta publicación,